Procuraduría se pronuncia por caso de muerte de un niño en el río Magdalena durante la práctica de un juego de alto riesgo
La Procuraduría General de la Nación lamenta la muerte del niño de ocho años que murió ahogado en el río Magdalena cuando competía con sus amigos en el juego denominado “desafío” y que, según las autoridades, no pudo liberarse de un ladrillo que previamente otros niños habían atado a sus pies.
El procurador general de la Nación, Alejandro Ordóñez Maldonado, hace un llamado enérgico a los padres de familia, acudientes y a la sociedad en general para que se asuma con responsabilidad la tarea de proteger a los niños y niñas, y prevenirlos contra cualquier conducta que amenace su vida o integridad personal.
Juegos peligrosos o que impliquen alto riesgo para ellos deben ser evitados; todo adulto, vecino o amigo que observe su práctica, debe intervenir para impedir su ocurrencia. Por su corta edad, los niños y niñas no alcanzan a percibir el peligro y las consecuencias de sus comportamientos; los padres y familiares cercanos son los llamados a enseñar, educar, cuidar, proteger y prevenir toda conducta que pueda causarles daño.