Procuraduría, alarmada por los casos presentados de balas perdidas, lamenta la muerte de Lesy Torres Calao y se solidariza con los padres de la menor de edad

La Procuraduría general de la Nación manifiesta su solidaridad a los padres y familiares de la niña Lesy Torres Calao, quien falleció a sus seis años de edad, el 1 de enero en horas de la madrugada en la ciudad de Montería, siendo otra de las manifestaciones de violencia e irresponsabilidad social, pues su muerte se produjo luego de ser víctima de un bala perdida cuando se encontraba  en su hogar durmiendo con su mamá, según las informaciones recibidas por los medios de comunicación.
 
Para la Procuraduría son alarmantes los casos de balas perdidas registrados durante el año 2011, pues del 1 de enero al 28 de diciembre se registraron, según reporte de la Policía Nacional, 15 homicidios de los cuales 5 eran menores de edad e igualmente 100 casos de personas lesionadas, 15 de ellas menores de 18 años.

Frente a este panorama urge diseñar estrategias y adoptar medidas paralelas que propendan por un bienestar social integral, pues no sólo se trata de prohibir el porte de armas de fuego a los particulares porque esto incrementaría la clandestinidad y la venta ilegal de las mismas, sino que se debe educar a la población creando cultura de respeto por la vida, de tolerancia frente al otro, diseñando campañas que involucren tanto a los adultos como a los infantes.

“Hay que desarmar no sólo a los adultos sino a los niños y las niñas de sus juguetes violentos”, señaló la procuradora delegada para la Defensa de los Derechos de la Infancia, Ilva Myriam Hoyos Castañeda, quien concluyó diciendo que igualmente el Estado debe generar seguridad y confianza a los ciudadanos, por tanto, debe crear nuevas alternativas para asegurar la convivencia pacífica y la vigencia de un orden justo, como uno de los fines esenciales del Estado Social de Derecho.

PGN | Fecha Publicación: jueves, 5 enero 2012 10:20 AM