Comprende los aspectos que acompañan el habla y que sirven para modular un mensaje. Se describirán los más relevantes.
Volumen de voz: Permite que el mensaje llegue a otras personas con las que nos relacionamos. “El volumen de voz con el que se habla puede servir para destacar el mensaje o parte del mensaje que trasmitimos” (V.Caballo, 2007).
Tono: El tono permite transmitir las emociones durante la conversación; la intensidad del tono con la que el mensaje es transmitido puede tener diversos significados.
Fluidez/perturbaciones del habla: Esta se relaciona directamente con el ritmo del habla, es decir la forma en que las palabras son emitidas. Las vacilaciones, las repeticiones, omisiones y palabras sinsentido pueden causar una impresión de inseguridad, incompetencia o dudas.
El habla se utiliza para varios propósitos, entre ellos, expresar ideas, describir sentimientos, argumentar, orientar, brindar instrucciones, realizar preguntas y dar respuestas.
Por esto, es necesario que los funcionarios encargados de la atención al ciudadano, tengan las siguientes habilidades:
• Saber transmitir la información.
• Facilitar en el ciudadano la comprensión.
• Dejar hablar. Si está hablando todo el tiempo, no se puede escuchar al otro.
• Habilidades orientadas a la realización de preguntas: saber escuchar, saber formular preguntas abiertas y cerradas, reformularlas de acuerdo al relato del ciudadano y sintetizar. Tener en cuenta que las preguntas indican interés por la otra persona.
• Utilizar un lenguaje claro, sencillo, que le permita sentir al ciudadano que están en el mismo nivel de comunicación y comprensión. No utilizar tecnicismos, en caso de tener que utilizar una sigla, siempre debe aclararse su significado.
• Llamar al ciudadano por el nombre que él utiliza, no importa si es distinto al que figura en la cédula de ciudadanía o al que aparece en la base de datos de la entidad.
• El lenguaje para hablar con los ciudadanos debe ser respetuoso, frases amables como: “con mucho gusto, ¿en qué le puedo ayudar?,” siempre facilitan la comunicación.
• Conducir la conversación sin interrumpirla; para ello suele ser útil resumir, preguntar y parafrasear.
• Si la respuesta a la solicitud del ciudadano es negativa, tener en cuenta lo siguiente: cuando se niega alguna solicitud es necesario decir las cosas como son, no generar falsas expectativas. Sin embargo, es necesario mostrar interés, ofreciendo todas las explicaciones necesarias para que el ciudadano comprenda la razón y brindarle alternativas que, aunque no sean exactamente lo que se espera, ayudarán al ciudadano a solucionar su petición y le mostrarán que él es importante y que la intención es prestarle un servicio de calidad, a pesar de las limitaciones.
• Asegurarse que el ciudadano entendió la respuesta, los motivos que la sustentan y los pasos por seguir, si los hay.
• Evitar criticar y argumentar en exceso, ya que esto pone al interlocutor a la defensiva y probablemente lo conduciría a que se enoje o no se exprese.
Es la capacidad que tienen las personas de ponerse en el lugar de los demás. Está dirigida, entre otras cosas, a la escucha activa, la comprensión y el apoyo. Es precisamente esa comprensión de las motivaciones de los demás la que genera que seamos más receptivos, tolerantes y podamos entender sus necesidades o inquietudes con mayor precisión.
Recomendaciones:
• Demuestre al usuario que le ha entendido perfectamente y que se ha enterado bien de su problema.
• Demuestre al interlocutor que está dispuesto a escucharle, al manifestarle claramente su interés; que lo hace para tratar de entender y no para oponerse.
Es la eficacia y agilidad para dar soluciones a problemas detectados o a situaciones difíciles, emprendiendo las acciones necesarias para corregirlos con sentido común e iniciativa. Por ejemplo, cuando se atiende público, se presentan casos en los que llegan a la Entidad ciudadanos inconformes, ofuscados, o furiosos, a veces por desinformación o porque la respuesta no es la esperada. En estos casos se recomienda:
• Mantener una actitud amigable y mirar al interlocutor a los ojos.
• No mostrarse agresivo verbalmente ni con los gestos, ni con la postura corporal.
• Dejar que el ciudadano se desahogue, escucharlo atentamente, no interrumpirlo ni entablar una discusión con él.
• Evitar calificar su estado de ánimo, y no pedirle que se calme.
• No tomar la situación como algo personal: entender que el ciudadano se queja de un servicio, no de la persona.
• Usar frases como “lo comprendo”, “claro que sí”, que demuestran conciencia de la causa y el malestar del ciudadano.
La Procuraduría General de la Nación, tiene el compromiso de “trabajar con la Constitución en la mano”, para esto elaboró el Plan Estratégico Institucional - PEI 2017 – 2021 “Por una Procuraduría Ciudadana”, adoptado mediante Resolución 516 del 2017, el cual apunta a recuperar la confianza y fortalecer las capacidades del Estado, identificar, prevenir, intervenir, sancionar y no tolerar la corrupción y la mala administración.
También busca garantizar derechos, cumplir deberes y salvaguardar el ordenamiento jurídico. El PEI promueve 4 dimensiones: la humanista, en la cual el ciudadano es el centro del accionar de la Entidad, la constitucional que es el logro del Estado Social de Derecho de la Constitución del 91 como marco de referencia y objetivo máximo, la cultural que busca reconocer las diferentes motivaciones de los comportamientos de los ciudadanos, y la diferencial, que promueve la inclusión y reconoce las diferencias por etnia, género o alguna condición especial.
Dentro de los objetivos del PEI, está promover la efectividad de los derechos y la legitimidad de las instituciones, implementando mecanismos de prevención y respuesta a su vulneración; para dar cumplimiento a ésto, la Procuraduría General de la Nación y el Banco Interamericano de Desarrollo – BID emprendieron una serie de acciones para avanzar hacia la consolidación del programa de Fortalecimiento de la Entidad.
Las actividades que adelanta el programa, específicamente las establecidas en el componente 3, buscan fortalecer las capacidades de la Entidad en materia de integridad, transparencia y participación ciudadana, dando así cumplimiento a la Ley 1712 de 2014 por medio de la cual se crea la Ley de Transparencia y del Derecho de Acceso a la Información Pública Nacional.
Esta ley establece que las entidades tienen la obligación de divulgar proactivamente la información pública y responder de buena fe, de manera adecuada, veraz, oportuna y accesible a la atención de peticiones, quejas, reclamos, solicitudes y denuncias de la ciudadanía.Para dar cumplimiento a lo anterior, la Procuraduría General de la Nación tiene prevista la ejecución de productos específicos, relacionados directamente con la gestión de responder a necesidades de la ciudadanía, entre los cuales se encuentra el Protocolo de Atención al Ciudadano.
Para esta implementación, se realizaron visitas a algunas Procuradurías regionales y provinciales, con el fin de diagnosticar la manera en que se presta el servicio al ciudadano, a partir del diligenciamiento de cuestionarios con algunos funcionarios que atienden ciudadanos e igualmente, mediante la aplicación de la Metodología de Cliente Incógnito, lo cual permitió evaluar y medir la calidad de la atención prestada. También se revisó la atención de los agentes del Centro de Contacto en el canal telefónico
Dentro de los resultados más representativos, se evidenció, gracias a la aplicación del cliente incógnito, que es necesario fortalecer la calidad y la oportunidad en el suministro de información institucional y de interés ciudadano, para evitar la dilación en la recepción de peticiones, quejas, reclamos o sugerencias por el canal telefónico y presencial en el primer momento que el ciudadano hace contacto con la entidad, ya que en ocasiones, los funcionarios se limitan a orientar pero no hacen la recepción de manera inmediata de las solicitudes, ocasionando pérdida de tiempo y recursos para el ciudadano al no ver resuelta su necesidad de manera oportuna. Es fundamental hacer entender a los funcionarios que atienden ciudadanos, que una información incorrecta o incompleta, genera una experiencia negativa con la entidad. También se evidenció la necesidad de brindar directrices para organizar las interacciones con los ciudadanos en el canal telefónico y presencial.
Teniendo en cuenta lo anterior, este diagnóstico permitió recoger, analizar y evaluar la realidad de las necesidades del ciudadano en cuanto a la atención de los funcionarios en la Procuraduría General de la Nación y de esta manera, se identificaron las problemáticas, para reducir la brecha entre el desempeño actual de los colaboradores y el deseado.
Por este motivo, el presente protocolo promueve la comunicación asertiva, estimula el cambio de comportamiento en los colaboradores a través del refuerzo de habilidades sociales, brinda directrices para organizar y mejorar las interacciones entre el funcionario y el ciudadano, contribuyendo a la sensibilización y formación de mejores funcionarios públicos, involucrando la reflexión, el conocimiento y la construcción colectiva para que se apropien de su rol, al asumir el servicio como un elemento fundamental en su vida laboral que los llevará a tener como primer deber y obligación la prestación de un servicio con excelencia.
Las anteriores acciones contribuyen a fortalecer la confianza en la entidad y la acercan a las necesidades reales de los ciudadanos.
Los funcionarios de la Procuraduría General de la Nación, especialmente aquellos que atienden al ciudadano, debe tener en cuenta las siguientes características o atributos para brindar un servicio de calidad.
Todas las respuestas o resultados deben darse en el momento adecuado y deben cumplir con los términos acordados con el ciudadano.
Ejemplo: Darle a los ciudadanos respuesta en los términos de Ley.
El proceso de servicio debe resolver exactamente lo requerido por el ciudadano.
Ejemplo: Dar respuesta completa y coherente a la solicitud del ciudadano.
La gestión de servicio cambia y se debe reinventar de acuerdo con las necesidades de las personas, los desarrollos tecnológicos y de las experiencias de servicio de la entidad. El funcionario deber ser creativo para dar al ciudadano diferentes alternativas y una experiencia de buen servicio. Ejemplo: Utilizar el Centro de Relevo cuando se acerque a un punto de atención una persona con discapacidad auditiva.
Las respuestas y resultados deben ser certeras, basadas en normas y procedimientos. Ejemplo: Dar respuesta a un Derecho de Petición, teniendo en cuenta los procedimientos internos de la entidad y la normatividad vigente que haya del tema.
El servicio debe ser de la misma calidad para todos los ciudadanos, al reconocer y respetar la diversidad de todas las personas. Ejemplo: Atender sin prejuicios a una persona que durante la interacción le mencione al funcionario que es bisexual.
Durante el ciclo de servicio los funcionarios deben tener los perfiles idóneos, cumplir funciones y responsabilidades específicas, lo cual permite organizar y brindar una atención e información con calidad de acuerdo con las necesidades de los ciudadanos. Ejemplo: Transferir una llamada al abogado del Centro de Contacto para que brinde asesoría jurídica a un ciudadano.